En mi pueblo, Pineda del Talle, hay una tradición que conoce muy poca gente… de hecho sólo la conocemos tres personas… cada 2 de febrero mi vecina Mar Mota Collantes se levanta de la cama muy temprano, y no precisamente para ayudar a su pobre mamá, se despoja de la camiseta de su esquijama y abre de par en par la ventana de su cuarto, que está orientada al norte, y si se la ponen los pezones como para colgar toallas de playa empapadas, que en pleno Valle del Gayola es siempre, se vuelve a la cama, da dos codazos a David Murray de Jesús, su esposo, y le dice:
– David Murray, no sé si este invierno va a durar otras seis semanas o va a terminar en breve, pero hoy me vas a poner el coño como un frigorífico combi no frost… lleno de carne, huevos y leche.
– Tengo la extraña sensación de que esto ya lo he vivido… pero ya lo pensaré en otro momento, que no seré quien rompa este momento tan mágico… al lío.
Y así está el tema. Que la Fuerza os acompañe siempre y en todo lugar.
Photo Credit: Kennymatic